Acabamos de volver de Casesnoves y ya estamos deseando volver. Toni y Sofi te hacen sentir como en casa, mimándote en todo lo que te puedas imaginar. Consigues desconectar de la rutina y pasear por Guadalest por la noche, cuando ya no hay turismo, es una gozada.
Los desayunos son…sin palabras. Desde fruta hasta huevos, todo lo que puedas imaginar está en ese desayuno. A todo esto hay que sumar que son productos de proximidad, por lo que también ayudan al agricultor de la zona o a la pequeña empresa que se dedica a los quesos.
Toni, Sofi, mil gracias por conseguir que desconectemos del ritmo de vida que llevamos hoy en dia. A veces, hay que echar el freno e ir a Casesnoves a hacer reset!
Volveremos!
Gracias!